Cuando Alondra estaba más chiquita muy seguido le entraba el patatús. El patatús según su papá y yo es cuando a pesar de haber probado todo y hacer checklist de sus posibles necesidades (brazos, hambre, pañal, sueño, dolor, calor, frío) a nada le atinábamos y seguía llorando. Mi teoría es que a veces los bebés lloran porque extrañan el lugar donde vivieron 9 meses.