Tocó limpieza y orden en el clóset de mi hija. Saqué la ropa que ya no le queda y almacené otras cosas que ya no usa, ya saben por si tenemos otro bebé. Entre esas cosas, la mochila ergonómica que tantas alegrías nos dio pero que ahora le queda pequeña. También guardé por ahí algunos pañales que se quedaron sin usar porque ahora es una experta del calzón.
Llevamos siglos intentando conseguir la paz del mundo, hombres ilustres y grupos civiles se han pronunciado en contra de la guerra y la violencia pero los resultados han sido pasajeros. Hemos errado las estrategias porque no hemos atendido el origen. Para cosechar una sociedad equilibrada debemos depositar las semillas de la paz en el inicio de la vida, solo ahí puede germinar la paz sustentable que tanto anhelamos.
¿Bebés independientes? Habrá que revisar a qué se refieren por independencia: doctores que recomiendan dejar llorar a los bebés, vecinas que aconsejan destetar abruptamente para que el bebé se haga “independiente” y así la mamá pueda hacer sus cosas, abuelitas en contra de embracilar.
Esta es la segunda entrega de la serie de posts “Reflexiones para sacar del hoyo a la sociedad” No hay política pública que mejore las condiciones de un país si no va acompañada de la transformación de la crianza y educación de los futuros ciudadanos. Gran parte de las problemáticas sociales tienen su origen en modelos de crianza autoritarios, permisivos o sobreprotectores.
Como sociedad no tenemos claro en qué consiste respetar a la infancia, aquí unos pocos ejemplos:
El mundo de la paternidad y la maternidad está lleno de opiniones encontradas sobre qué es lo mejor para los niños. Es difícil ponernos de acuerdo, porque cada familia y cada niño son un sistema diferente con necesidades y situaciones particulares.
Muchos creen que un castigo o unas nalgadas a tiempo harán que sus hijos no se conviertan en delincuentes o fracasados. Incluso muchos padres afirman haberlo logrado, que gracias a su mano dura sus hijos son gente de bien. ¿Pero a qué precio?
“Un día vi a un padre japonés llevar a caminar a su hijo pequeño. Los japoneses tienen un verdadero entendimiento de los niños. Los llevan a todas partes con ellos. Este era un niño de aproximadamente dos años de edad que caminaba lentamente y su papá caminaba lentamente también. En cierto momento, el niño se detuvo y se agarró de una de las piernas de su padre. El padre se detuvo con sus pies separados. El niño daba vueltas y vueltas alrededor de las piernas de su papá; para el niño esto era importante y el padre le daba importancia. Cuando el niño tuvo suficiente, el padre cerró las piernas y continuaron su camino. Después de un rato, el niño se sentó a la orilla del pavimento y el padre lo esperó pacientemente. Cuando el niño se levantó a seguir su camino, el padre también siguió. Este papá no tenía conocimientos de psicología, el estaba llevando a su hijo en un paseo y para el esta era la forma natural de hacerlo”. María Montessori The 1946 London Lectures Facebook: Apuntes de Mamá Instagram: @apuntesdemama Twitter: @apuntesdemama Comparte en tus redes:
Cuantas menos cosas haga un juguete, más cosas hará la mente del niño.
Si en mi barrio hicieran un concurso para premiar al tipo con el mejor espíritu navideño, a mi esposo seguro le daban una mención. Mi caso es diferente, digamos que antes me daba igual pero ahora que soy mamá la cosa cambió y la navidad me hace mucha ilusión.