El gobierno de la República Mexicana a través de la Secretaría de Salud emitió la Estrategia Nacional de Lactancia Materna 2014-2018 en ella pretende integrar las acciones que se realizan en el país para proteger, promover y apoyar la lactancia materna. En esta estrategia podemos encontrar los resultados que arrojó la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 en el rubro de lactancia materna.
Es preocupante constatar los motivos por los que ocupamos los últimos lugares de lactancia materna de América Latina (y por consecuencia los primeros lugares en muchos padecimientos como obesidad infantil y diabetes). La gráfica que a continuación presento ha formado parte de la evidencia para la política pública en salud desde el 2012 y es alarmante la lentitud con la que mejoran las cosas.
Analicemos los primeros 10 puestos de la gráfica “Motivos para nunca amamantar”
1º Para empezar tenemos que casi el 37% de las madres no amamantó por falta de leche, pero está comprobado que solo menos del 2% de la población femenina presenta este tipo de condición que se conoce como hipogalactia. ¿Y el 35% restante? El resto de las madres que no presentó esta condición probablemente abandonó su lactancia por mitos, diagnósticos equivocados, falta de información y apoyo.
2º y 5º Madre enferma y madre toma medicamento. Es habitual que los médicos indiquen a las madres suspender la lactancia en casos donde no existe un riesgo, o que desconozcan de la compatibilidad de los medicamentos con la lactancia materna. A falta de preparación en el tema muchos médicos terminan con lactancias que pudieron ser rescatadas. Salvo quimioterapias, VIH y otras pocas excepciones, la madre puede continuar amamantando a su bebé y beneficiarlo de los anticuerpos que específicamente se producirán al momento de la enfermedad de la madre para protegerlo.
3º En tercer lugar le echan la culpa al bebé; no quiso prenderse al pecho, no le gustó, no sabia succionar, prefería la mamila. Si permitimos un nacimiento respetado, sin muchas intervenciones y garantizamos el contacto inmediato madre-bebé, piel a piel, este motivo disminuiría y con ello una serie de problemas que aquejan la mayoría de las madres lactantes. Si el personal sanitario que asiste los partos y cesáreas fueran partícipes del objetivo de aumentar el índice de lactancia materna, dejarían de restar importancia a la primera hora sagrada del bebé, esa hora donde todo está diseñado por la naturaleza para que la madre y el bebé tengan un afianzamiento espontáneo del pecho. Pero no, la prioridad sanitaria es aislar al recién nacido y alimentarlo con fórmula.
4º En el lugar número cuatro tenemos el siguiente motivo: No me gustó. Aquí el planteamiento se abre a diferentes interpretaciones pero atendamos a dos variables: dolor y decisión personal. Amamantar no debería doler, el agarre correcto del bebé evita dolor y grietas en los pezones de la madre, a falta de asesoría capacitada este es el escenario que viven la mayoría de las mamás lactantes. Respecto a las madres que por decisión personal no quisieron amamantar, solo puedo decir que a veces lo que es mejor para un bebé no lo es para la madre.
6º y 7º: Bebés enfermos y bebés prematuros, son los que más necesitan beneficiarse de la leche humana, dejarlos a un lado solo nos habla de las carencias del sistema de salud. Los bebés enfermos necesitan del mejor alimento creado para ellos para ayudarlos a progresar.
8º Bebés adoptados. Aunque parezca imposible, esta no es una razón para que la nueva familia no pueda gozar de la lactancia materna, inducir la lactancia materna tiene grandes probabilidades en la mayoría de los casos.
9º Problema físico (pezón, labio bebé). No importa cómo sean los pezones de la madre, ni siquiera importa si fueron “preparados” antes del nacimiento, no importa porque el bebé no mama del pezón si no del pecho, un agarre correcto hace que la boca del bebé cubra gran parte de la areola. Respecto a las características físicas muchos bebés con frenillo, labio leporino o paladar hendido pueden gozar de la leche materna con la asesoría adecuada. Incluso en casos más graves los bebés pueden ser alimentados de leche materna extraída por la madre y suministrada con la ayuda de una jeringa o un vasito.
10º Bebé intolerante a la leche materna. Lo que en realidad padecen la mayoría de bebés es alergia a la proteína de la leche de vaca que puede resolverse cambiando la dieta de la madre. En otros mínimos casos el bebé presenta una intolerancia temporal a la lactosa esto no es motivo para destetar. Por último existe una condición muy rara llamada galactosemia, los bebés que la padecen no pueden ingerir leche materna, ni ningún tipo de leche que contenga lactosa, su incidencia es de aproximadamente 1 de cada 50.000 personas.
Estos diez motivos y el resto de razones que aparecen en la gráfica, en su mayoría, son circunstancias evitables y tratables. Para que existan más motivos por los que sí damos el pecho en México urge que atendamos las siguientes carencias:
- Necesitamos una legislación que proteja la lactancia materna: por ejemplo que las madres trabajadoras puedan estar más meses con sus bebés antes de volver al trabajo y que cuenten con el apoyo de sus empleadores para contar con espacios para la extracción (lactarios).
- Una campaña que influya en la percepción de la lactancia natural en la población en general y que brinde la información adecuada.
- Más centros médicos que cumplan con el estándar Hospital Amigo del Niño y de la Niña
- Cumplimiento del Código de Sucedáneos de la Leche Materna para que ningún médico regale muestras de fórmula ni las recete a diestra y siniestra, es lamentable como la industria de la fórmula tiene comprado el sector sanitario en nuestro país.
- Y el más importante: que los planes de estudio de las carreras formadoras de personal médico y de enfermería en las diferentes universidades del país contemplen la materia de lactancia materna.
- Promoción a los grupos de apoyo y las asesoras en lactancia materna.
Como mencionaba al principio las cosas van mejorando pero lentamente, este año UNICEF anunció que el índice de lactancia materna hace tres años era de 14.4% y este año alcanzamos el 30.8% Este aumento se debe en parte a la labor de grupos de madres para apoyar la lactancia, a consultoras certificadas, hospitales prolactancia, personal actualizado y el fácil acceso en internet a contenidos confiables sobre el tema . Pero queda mucho por hacer, la leche materna puede ser una vía para que nuestro país progrese. Reinvindiquemos el poder femenino de dar vida y alimentarla con nuestro pecho, luchemos en nombre de las madres que sí querían amamantar pero fueron incorrectamente informadas, privándolas de su capacidad de dar de mamar a su bebé por el tiempo que ellas hubieran querido.
Por Karla Zárate · Asesora de lactancia en formación
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